El retroceso de los glaciares genera impactos en diversos ámbitos:
- Aumento del nivel del mar. Contribuye a la erosión costera y a la pérdida de territorios habitables.
- Alteraciones climáticas. Modifica patrones de precipitación y aumenta la frecuencia de eventos extremos.
- Pérdida de biodiversidad. Afecta ecosistemas que dependen del agua de deshielo.
- Menor disponibilidad de agua dulce. Impacta el suministro de agua potable y la producción de alimentos.
- Mayor riesgo de desastres naturales. Provoca avalanchas, inundaciones y sequías más severas.
A corto plazo, el deshielo puede generar un exceso de agua, pero a largo plazo, reducirá la disponibilidad del recurso, afectando actividades humanas esenciales. Hacer algo al respecto se vuelve imperativo.
Su desaparición afectaría la biodiversidad y el equilibrio ambiental, por lo que es apremiante la implementación de medidas que los protejan. Es urgente que gobiernos, empresas y sociedad deben coordinar esfuerzos para frenar su desaparición y mitigar los efectos del cambio climático.
Un gran ejemplo de liderazgo empresarial son los dueños de La Cosmopolitana, que toman su parte de responsabilidad al contar con un Sistema de Gestión Ambiental avalado por la ISO 14001, así como la distinción del Programa Transporte Limpio.