Hoy en día, cada vez más empresas llevan a cabo distintos esfuerzos e iniciativas para convertirse en una empresa incluyente. Gracias a estas acciones, han obtenido reconocimientos importantes de instituciones gubernamentales.
Sin embargo, es común que la mayoría de las organizaciones no sepa bien cómo empezar a hacerlo.
Para eso, compartimos los siguientes consejos:
- Conoce a tus colaboradores. Identifica los porcentajes de hombres y mujeres, cuántos de ellos son madres o padres de familia, cuántas personas dependen económica o físicamente de ellos, si tienen alguna enfermedad o padecen alguna discapacidad, etcétera.
- Escucha a tu equipo y fomenta las conversaciones. Pregúntales sobre sus necesidades, escúchalos con atención y responde con acciones.
- Elabora una política de inclusión. ¡Recuerda comunicarla a lo largo y ancho de tu organización!
- Crea un comité de diversidad que se encargue de supervisar que la política y las prácticas de inclusión sean respetadas.